Acapulco es sin duda alguna uno de los destinos turísticos más populares por sus atardeceres, su clima, sol, arena, mar, la fiesta entre muchas otras cosas. Sin embargo hoy presentaremos algunas otras curiosidades que la perla del Pacífico alberga y que no conocías, pero ahora que las enumeremos, te invitamos a vivir la experiencia que sólo este paradisiaco lugar te puede brindar.

Iniciemos con la Casa de los vientos. Históricamente, en este lugar vivió el famoso pintor y artista Diego Rivera, quien nos heredó una parte de su creatividad en el interior de este sitio, principalmente en el techo, la terraza y barandales además de un majestuoso mural en el exterior del inmueble con una longitud de más de 70 metros cuadrados. Esta enorme pieza de arte la puedes apreciar visitando la zona tradicional de Acapulco en la calle que por cierto lleva su nombre en el fraccionamiento Las Playas cerca del cerro de La Pinzona y representa a Ehecatlcall (la casa de Ehécatl, Dios del viento).

Otro lugar que debes conocer es el cocodrilario acutus en barra vieja. Aquí encontrarás a 45 ejemplares de esta especie protegida por la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) para la Conservación de Vida Silvestre.

Muy cerca de ahí se sitúa la laguna de tres palos. Posee una longitud de 15 kilómetros de largo por 5.5 kilómetros de ancho, mismos que puedes recorrer en lancha y descubrir la diversidad de flora y fauna que existe. Así mismo puedes relajarte con un tratamiento a base de barro y arcilla que promete exfoliar tu piel y dejarla tersa y suave.

Si tu propósito es relajarte, alejarte de la ciudad, alinear tus chakras, purificar tu energía, conectar contigo mismo y con la naturaleza entonces el jardín holístico te espera con las puertas abiertas. Este resort ecológico posee cabañas en las que puedes hospedarte, disfrutar de los aromas naturales provenientes de la vegetación que lo rodea además de disfrutar de una sala o un baño en jacuzzi al aire libre. Este lugar es considerado como un centro de sanación debido a que se realizan sesiones de meditación, talleres, rituales y otras actividades con fines curativos.

Ahora que si lo tuyo son los deportes entonces te recomendamos visitar la isla de La Roqueta.
Este lugar es perfecto para practicar snorkeling. Descubrirás la fascinante flora y fauna que hay en las profundidades o también poner aprueba tu destreza y equilibrio a bordo de una tabla y practicar paddle board.

Y ya que estamos en la zona tradicional, visita playa Caleta. Esta es una de las playas más tranquilas de Acapulco. Disfruta de sus exquisitos platillos y bebidas servidas al estilo costeño, bañarte en sus aguas e incluso remar en kayak.

A cualquier hora del día puedes realizar un recorrido tranquilo por la bahía Santa Lucía a pie o mejor aún: en bicicleta. El paseo del pescador es el lugar perfecto para realizar esta actividad sobre ruedas y si no tienes una bicicleta, nuestros amigos de Aca en bici te pueden rentar una.

Si eres una persona de personalidad extrema y no le temes a los retos, entonces lanzarte desde la tirolesa más grande del mundo sobre el mar te espera. Recorre 1.8 Kilómetros a 120 km/h en esta intrépida experiencia que te llenará de adrenalina. Seguramente volarás como lo hace Superman.

Y bueno en Acapulco no necesitas ser multimillonario o ser un mirrey para navegar a bordo de un yate. Pasear en este tipo de navios te permite apreciar la peculiar belleza y longitud de la bahía mientras celebras algún acontecimiento importante, disfrutar de la puesta de sol o ver el show de clavados en la quebrada desde otro ángulo. Si tienes mucha suerte con seguridad podrás toparte con delfines o hasta con ballenas.

Y es que Acapulco tiene tantas cosas de las que podrías quedar enamorado. Así que ¿por qué esperar las vacaciones? Lánzate un fin de semana y ven a disfrutar de Acapulco todas las veces que quieras.