Esta ubicada en la ladera del Cerro "La Cuesta", parte de El Veladero, que pertenece a la Sierra Madre del Sur; su altitud de 380 metros sobre el nivel del mar le permite tener una vista a la Bahía de Acapulco.
La parte que puede visitar el público posee una extensión es de tres hectáreas, conteniendo grabados distribuidos en 18 piedras; al parecer la parte habitacional se hallaba en la parte superior, donde se reporta la existencia de estructuras y materiales cerámicos.
El primer estudio extenso de la zona lo realiza Martha Cabrera entre 1980-1982 y recientemente Rubén Manzanilla publicó en el 2008 las manifestaciones Rupestres de Acapulco, que contiene el catálogo de petrograbados de Palma Sola.