En los últimos días, se ha observado la llegada de grandes cantidades de lirio acuático a distintas zonas costeras de Acapulco. Este fenómeno está directamente relacionado con la apertura de las barras lagunares, especialmente las de Tres Palos y Coyuca de Benítez, las cuales permiten la conexión entre lagunas y mar, ya sea por causas naturales o intervenciones humanas.
Cuando estas barras se abren, las corrientes marinas arrastran consigo esta planta flotante, que se reproduce con gran velocidad en ambientes acuáticos cálidos. Al llegar al litoral, el lirio no representa un riesgo para la salud o seguridad de los bañistas, pero su acumulación puede dificultar el acceso a la playa, nadar o realizar actividades turísticas y recreativas.
¿Qué es el lirio acuático y qué beneficios puede tener?
El lirio acuático (Eichhornia crassipes) es una planta originaria del Amazonas, muy eficiente en la absorción de contaminantes del agua. Actúa como filtro natural al captar metales pesados y nutrientes en exceso, ayudando a mejorar la calidad del agua en cuerpos lagunares. También brinda sombra a ciertas especies y puede servir como hábitat para organismos acuáticos.
Sin embargo, al proliferar sin control, reduce el oxígeno en el agua y afecta el equilibrio ecológico, además de obstruir canales y dificultar actividades humanas como la pesca o el turismo. Por esta razón, aunque tiene funciones ecológicas importantes, se le considera una especie invasora cuando su crecimiento se vuelve desmedido.
¿Qué se está haciendo al respecto?
Las autoridades locales y equipos de limpieza trabajan en el retiro progresivo del lirio de las franjas de arena para garantizar la funcionalidad turística y la limpieza del ecosistema. El proceso puede tomar tiempo debido a la gran cantidad acumulada, pero ya se están organizando brigadas para su recolección y disposición adecuada.
En resumen
La presencia de lirio acuático en Acapulco es un fenómeno natural que refleja la conexión viva entre las lagunas y el mar. Si bien puede resultar molesto en exceso, también nos recuerda la importancia de cuidar nuestros mantos de agua dulce, donde se origina su crecimiento.
Cuidar las lagunas es también cuidar nuestras playas.